Perspectivas económicas optimistas
El Banco Mundial ha mejorado su pronóstico sobre el crecimiento económico de Rumanía para este año al 3,9%, y para 2017, al 4,1%. Para Europa y Asia Central, una región que también incluye a Rumanía, pero sin la Eurozona, dicha institución financiera est
România Internațional, 07.01.2016, 13:54
El Banco Mundial ha mejorado el pronóstico de crecimiento económico de Rumanía para este año del 3,2 al 3,9%, y para 2017, del 3,5% al 4,1%, según indica el más reciente informe elaborado por dicha institución sobre la evolución de la economía global, hecho público este miércoles. Así, las perspectivas optimistas del BM han confirmado las estimaciones mejoradas anunciadas a finales del 2015, por la Comisión Europea y el Fondo Monetario Internacional, que daban por cierta la evolución positiva de la economía rumana en los últimos años.
El Ejecutivo comunitario anunciaba en su pronóstico de otoño, un crecimiento anual del PIB de un 4,1% para 2016 y de un 3,6 % para 2017. También lo ha confirmado el FMI, que prevé un aumento económico en un 3,9% para este año, mientras que el Gobierno de Bucarest estima un aumento del PIB en casi un 4%. Respecto al informe del BM, esta institución ha revisado al alza incluso las perspectivas de crecimiento económico para el año pasado, del 3 al 3,6%. Para la zona de Europa y Asia Central, que también incluye a Rumanía, pero no la Eurozona, se estima un ritmo de crecimiento de un 3% para 2016 y de un 3,5% para 2017 y 2018. Bulgaria debería registrar un aumento del PIB en un 2,2% este año y en un 2,7%, para el próximo año. Hungría aumentará en un 2,5%, y un 2,7%, respectivamente, y Polonia en un 3,7% este año y en un 3,9%, el próximo año.
El BM mantiene sus perspectivas optimistas para la evolución de la economía de Rumanía también en 2018, cuando estima un aumento del PIB en un 4%. Por otro lado, el Banco Mundial advierte que en esta región hay numerosos riesgos, como la posible intensificación de las tensiones geopolíticas, precios reducidos mantenidos para las materias primas, así como el declive de las exportaciones desde los países desarrollados. Según indica dicha institución internacional, la aceleración del ritmo de crecimiento en esta zona depende de la reanudación de las inversiones, que por ahora se han mantenido por debajo del nivel anterior a la crisis. En muchos países las inversiones públicas se han visto afectadas por el espacio fiscal limitado y las inversiones privadas, por el hecho de que las empresas intenten solucionar el problema de las deudas.
En algunos países miembros de la UE, como Bulgaria y Rumanía, las inversiones han recibido fondos estructurales europeos, pero la capacidad de absorción sigue siendo un problema. Según el Banco Mundial, uno de los factores regionales que podría afectar a Rumanía, y también a Bulgaria, es el descenso del crecimiento económico de Turquía. En el ámbito mundial, según señalan los autores de dicho informe, el crecimiento económico se verá afectado por problemas de las economías emergentes, pero el aumento del PIB debería registra un leve avance, del 2,4% en 2015 al 2,9% este año, según una evolución apoyada por el crecimiento de las economías desarrolladas.
(traducido por s.sarbescu)
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