Medidas para limitar los precios de la energía
La población de Rumanía seguirá protegida del fuerte aumento de los precios de la energía.
Ştefan Stoica, 02.09.2022, 10:06
Los rumanos seguirán beneficiándose de la limitación de los precios de la electricidad y el gas. El Ejecutivo ha tomado esta decisión mediante un decreto de urgencia y de él se beneficiarán cerca de 8 millones de hogares. Sin embargo, han aparecido algunos cambios. Una de las novedades de la medida establece que las pymes y las instituciones públicas pagarán un máximo de un leu por kilovatio hora, pero para el 85 % de la electricidad consumida. Se exceptúan los hospitales, las escuelas y las instituciones que ofrecen asistencia social, los cuales pagarán un máximo de un leu por kilovatio hora por toda la energía eléctrica consumida.
En cuanto al gas natural, los clientes domésticos solo se aplicará la limitación a las facturas si el año pasado no superaron los 50 000 megavatios hora. La limitación del precio de la electricidad se les aplicará a los consumidores domésticos hasta el 31 de agosto de 2023, para un consumo máximo de 255 kWh al mes. En cuanto a los valores de consumo eléctrico que superen ese tope, el precio lo fijará cada proveedor. Por otro lado, se multará a aquellos intermediarios que vendan a precios muy elevados debido a una cadena significativa de ventas y reventas. Lo cuenta Virgil Popescu, ministro de Energía:
«La famosa transferencia de electricidad de una comercializadora a otra para que vuelva al proveedor, con el fin de subir artificialmente el precio de la electricidad o del gas natural, a partir de ahora se va a sancionar con gran severidad, ya que no es normal que se produzca este tipo de comportamientos en el mercado. Así, se les sancionará con el 5 % del volumen de negocios, una multa de la que ahora dispone la ANRE, la Autoridad Nacional de Regulación de la Energía, y que podrá imponer.»
El sector eléctrico realizará una contribución solidaria, que se destinará a un fondo especial previsto para la energía. Así, para los productores se ha fijado un precio máximo de 450 leus por kilovatio, y toda cantidad que supere este límite se destinará al fondo especial de energía. En el caso de los intermediarios, se quedarán con el dos por ciento de los beneficios, mientras que el resto se considerará contribución solidaria. El impacto presupuestario de las medidas previstas en el decreto del Gobierno se estima en mil millones de leus mensuales (200 millones de euros). Si estas cantidades no se recuperan mediante el recién creado fondo de solidaridad, se complementarán con recursos de los presupuestos del Estado. El primer ministro Nicolae Ciucă espera que mediante los mecanismos introducidos se impidan los comportamientos especulativos en el mercado energético.
La Unión Salvar Rumanía (USR), desde la oposición, critica con dureza el decreto energético. «Todo este sistema de limitación genera caos y destruye el sector energético y la economía rumana lentamente, pero sin pausa», advierten desde la USR. Según el partido, los nuevos cambios dejan fuera del régimen de limitación de precios a muchas empresas que hasta ahora se han beneficiado, lo que provocará una reducción de la actividad, un aumento de los precios en el sector económico y la pérdida de puestos de trabajo.
Versión en español: Víctor Peña Irles