Los rumanos y el mercado laboral europeo
Los rumanos representan, en general, una ventaja para las economías de los países en que trabajan. Esta ha sido la conclusión de un informe de la Comisión Europea, que rechaza así la idea de que los rumanos, junto con sus vecinos búlgaros, son un problema
Florentin Căpitănescu, 14.10.2013, 16:58
Las lamentaciones de Berlín sobre una masiva ola de inmigrantes procedentes principalmente de Rumanía y Bulgaria no tienen ningún fundamento, dado que en general estos últimos no recurren mucho al sistema de protección social de Alemania. Esta es la posición oficial que la Comisión Europea ha expresado en un informe que analiza los efectos de la emigración en la UE sobre los presupuestos de protección social en los países miembros. Según indica este documento, citado por Deutsche Welle, la economía alemana es una de las beneficiarias del valor añadido que aportan los emigrantes, que además no representan más del 5% del número de personas que reciben subvenciones sociales, es decir, el mismo porcentaje que en Finlanda, Francia, Países Bajos o Suecia. Dicho documento también menciona la existencia de pocos argumentos que podrían sugerir que el principal motivo para que los ciudadanos de la UE se vayan a vivir a otro país miembro, en este caso Alemania, es obtener ventajas sociales.
Las conclusiones de este informe han sido confirmadas por el comisario europeo de Empleo, Asuntos Sociales e Inclusión, László Andor, que ha declarado que la gran mayoría de rumanos y búlgaros tienen puestos de trabajo, pagan sus impuestos y contribuciones sociales y gastan su dinero en este país. Las explicaciones en detalle presentadas ante el Ejecutivo comunitario de Bruselas surgen tras haber expresado en público el ministro alemán del Interior, Hans-Peter Friedrich, las inquietudes de que su país se convierta en un destino favorito para los rumanos y los búlgaros, sobre todo los de etnia gitana, que quieren obtener ingresos fáciles, bajo la forma de ayudas sociales por parte del estado alemán.
Según declara Friedrich, Bruselas deberá controlar la utilización por parte de Bucarest y Sofía de los fondos europeos que están destinados a la integración social de los gitanos. Sin embargo, los ataques lanzados por el mandatario alemán no terminan aquí. Tras haber advertido sobre el peligro que afronta Alemania a causa de lo que él llama “una ola de inmigrantes muy pobres”, Friedrich ha dicho que las personas que han hecho de su estancia en Alemania solo un interés económico no deben tener derecho a la libre circulación.
Anteriormente a las declaraciones del ministro alemán, Rumanía, a través de su Ministerio de Exteriores, había reiterado que el asunto de su integración en el espacio de Schengen no se debía vincular con el tema de los gitanos, que de hecho es un problema de dimensión europea. Debates similares sobre los rumanos y los búlgaros se han organizado en varios países europeos, sobre todo en Reino Unido. En este país, por un lado se han debatido las ventajas económicas aportadas por los trabajadores rumanos y búlgaros y, por otro lado, la posible presión que estos últimos ejercen sobre los sistemas de educación y asistencia social.
(trad. S. Sarbescu)