Las implicaciones sociales de la crisis
Un estudio realizado por los sociólogos del Instituto de Investigación de la Vida de la Academia Rumana indica que el nivel de vida se verá afectado debido a la pandemia del coronavirus.
Leyla Cheamil, 27.04.2020, 13:23
Han pasado unos cuatro meses de la aparición por primera vez en la ciudad china de Wuhan del nuevo coronavirus que se ha propagado muy rápidamente afectando la vida diaria de todo el mundo. En un determinado momento, esta pandemia acabará, pero sus efectos serán muy duros. Un estudio realizado por varios sociólogos del Instituto de Investigación de la Vida de la Academia Rumana advierte que Rumanía se enfrenta paralelamente a dos crisis en el contexto de la pandemia del nuevo coronavirus: la sanitaria y la económica. Según el informe denominado ”La pandemia y el nivel de vida. Políticas de protección social”, a diferencia de la crisis sanitaria que produce efectos inmediatos, la crisis económica tiene implicaciones sociales que ya se resienten y serán visibles inmediatamente y a medio plazo. El nivel de vida se verá afectado sobre todo una vez acabada la crisis sanitaria, según señalan los investigadores que también subrayan que ”las lecciones” de las crisis por las cuales pasó Rumanía, con efectos en el plano económico y social, indican que los rumanos recuperarán el poder adquisitivo de los sueldos y las pensiones dentro de cinco años como mínimo. Éstos precisan que una parte de los ingresos de la población ya se ha reducido y los más afectados son los asalariados que están en paro técnico ya que los contratos laborales de más de un millón de personas se han suspendido. También se ven afectados los trabajadores informales, los que se dedican a la agricultura de subsistencia cuyo número no se conoce así como las personas que recientemente han vuelto del extranjero y no tienen ingresos.
Una de las propuestas de los sociólogos en este caso es subir la indemnización por desempleo para los próximos 3-6 meses a 1.000 lei al mes (unos 200 euros), valor equivalente al 75% del salario mínimo neto. En cuanto a la asistencia social, los investigadores proponen un ingreso mínimo de 1.000 lei en los próximos 3 meses, incrementar en los próximos 3 meses los fondos para las ayudas de emergencia destinados a los ayuntamientos, revisar la ley de asistencia social y elaborar estrategias sectoriales en el campo social para 2021-2027 en base a la nueva realidad. El informe también señala que según las estimaciones del FMI, el déficit público de Rumanía alcanzará el 8,9% del PIB, el equivalente a unos 19.000 millones de euros, y el PIB disminuirá en un 5%. Para apoyar el déficit público, las propuestas de los sociólogos incluyen negociaciones urgentes con el Fondo Monetario Internacional y la introducción del impuesto de solidaridad. Asimismo, se recomienda derogar o prorrogar la ley de pensiones aprobada en 2019, incrementar el punto de pensión al valor de la inflación, aumentar los sueldos sólo para compensar el índice de inflación o reintroducir un esquema salarial nacional unitario para la administración local.