La Unión Europea y Ucrania
Al mostrar su preocupación por lo que consideran la crisis geopolítica más grave de Europa tras la Guerra Fría, los líderes europeos intentan encontrar soluciones para la situación de Ucrania.
Bogdan Matei, 07.03.2014, 15:08
Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea se han reunido este jueves en Bruselas para poner en marcha una serie de sanciones políticas contra Rusia. La UE ha suspendido las negociaciones sobre la liberalización de los visados para los rusos que viajan por Europa y ha aplazado la participación en la cumbre del G8, que iba a tener lugar en Sochi. Además, la UE advierte a Rusia de que habrá sanciones económicas si no inicia rápidamente el diálogo con las autoridades legítimas de Kiev. La Unión Europea considera que la decisión del parlamento prorruso de Crimea de solicitar la entrada de esta república autónoma en la Federación Rusa es ilegal y opina que la retirada de las tropas rusas de la península es una medida esencial para la soberanía y la integridad territorial de Ucrania. El presidente de Rumanía, Traian Băsescu, ha participado en la cumbre y ha anunciado la disponibilidad de nuestro país para participar en las posibles negociaciones. Băsescu afirma que Rumanía puede ser un colaborador equitativo. Por otro lado, Rumanía no depende energéticamente de Moscú y no tienen grandes intereses económicos en este país. He aquí la declaración de Traian Băsescu:
“Hay 400.000 ucranianos que hablan rumano, es decir, que ocupamos el segundo lugar en Ucrania, tras la minoría rusa. En segundo lugar, Rumanía es el miembro de la Unión Europea más cercano a Crimea, que está a únicamente 160 millas marinas de distancia, lo que para una de las 400 naves de la flota de la Federación Rusa de Sebastopol significa como máximo 10 horas hasta las fronteras de Rumanía. Asimismo, Rumanía está a 100 kilómetros de distancia del conflicto congelado de Transnistria.”
El jefe del Estado ha anunciado que ha aprobado la participación de Rumanía con expertos en la misión de la OSCE en Ucrania y ha solicitado a los nuevos líderes de Kiev que anulen la ley de las minorías, a través de la cual el rumano pierde el estatuto de lengua regional. La situación de la comunidad rumana en el país vecino y las relaciones bilaterales en general se podrán aclarar el próximo lunes, cuando el ministro rumano de Exteriores, Titus Corlățean, hará una visita a Kiev.
(Trad. Monica Tarau)