La rotación gubernamental se aplaza
La huelga de la educación cambia la agenda política. Ştefan Stoica amplía la información.
Ştefan Stoica, 29.05.2023, 12:17
El acuerdo en el que se basó la creación de la actual coalición gobernante de Rumanía, firmado en noviembre de 2021, estipula que el primer ministro y presidente de los liberales, Nicolae Ciucă, debe entregar el mandato de jefe del Ejecutivo al cabo de un año y medio, para que asuma ese cargo el presidente de los socialdemócratas, Marcel Ciolacu, quien es, actualmente, el presidente de la Cámara de Diputados. La entrega del mandato debía haberse producido el viernes, 26 de mayo, pero los líderes políticos de la coalición integrada por el Partido Socialdemócrata (PSD), el Partido Nacional Liberal (PNL) y la Unión Democrática de Húngaros en Rumanía (UDMR) decidieron que no era el momento oportuno, por estar en curso la huelga de los profesores. Hace falta estabilidad para encontrar soluciones a un conflicto social sin precedentes en las dos últimas décadas, han subrayado ellos.
Nicolae Ciucă: «Lo estuvimos hablando ayer, hasta altas horas de la noche, nos hemos vuelto a reunir esta mañana y hemos acordado que, hasta que se solucionen estos problemas, no entregue mi mandato y siga asumiendo la responsabilidad del cargo de primer ministro. De este modo, espero que se creen las condiciones necesarias para que, en un lapso lo más corto posible, podamos llevar a la práctica el plan de rotación en la coalición».
El homólogo de Ciucă en el Partido Socialdemócrata (PSD), Marcel Ciolacu, es el que ha lanzado la idea de que las conversaciones políticas en torno al reparto de los cargos de ministro continúen después del cese de la huelga.
Marcel Ciolacu:
«Es una decisión que asumimos juntos; juntos seguiremos adelante –yo, en calidad de presidente de la Cámara de Diputados, representando el Legislativo, usted en calidad de primer ministro, representando el Ejecutivo–, para solventar cuanto antes este problema, sin duda legítimo, planteado por los profesores, pero también hace falta tener equilibrio para encontrar los momentos más propicios. Y juntos hemos asumido el hecho de que en el programa de gobierno la prioridad número uno la representan los profesores y el sistema sanitario».
El presidente de la Unión Democrática de Húngaros en Rumanía (UDMR), Kelemen Hunor, no está directamente implicado en la rotación en la jefatura del Ejecutivo, pero considera que aplazarla es una medida necesaria. La actual coalición tiene la oportunidad de hacer cosas beneficiosas para Rumanía, piensa Hunor:
«Yo sigo siendo optimista, confío en nuestras fuerzas y confío en que la gente sabe que estamos atravesando un período difícil, pero tenemos, al mismo tiempo, una oportunidad enorme. Rumanía, en esta década, puede recorrer y recorrerá un camino. Al final del camino tendremos una sociedad mucho más desarrollada, con servicios públicos buenos, con instituciones estables, con instituciones que respondan a las necesidades de la gente».
Desde la oposición, el presidente de la Unión Salvar Rumanía (USR), Cătălin Drulă, acusa a los líderes de la coalición, que llevan ya muchos meses negociando los cargos del futuro Ejecutivo, de estar desconectados de la realidad y afirma que postergar la rotación es una prueba más del fracaso de este gobierno. «Han desaprovechado hasta el proyecto más querido del presidente Iohannis, Rumanía Educada. Hoy, cuando tenía que haberse producido la rotación, tenemos la primera huelga general de la educación de los últimos 18 años, los profesores están en la calle, las escuelas están cerradas y los niños están en casa», ha concluido Drulă.
Traducción al español: Gabriela Ristea