La percepción de los rumanos sobre la crisis de Grecia
En el contexto de la crisis de Grecia, un poco más de la mitad de los rumanos consideran que Rumanía no corre ciertos riesgos porque usa el leu y no ha adoptado el euro.
Mihai Pelin, 22.07.2015, 18:07
Casi la mitad de los rumanos consideran que la población de un estado debería hacer sacrificios para que su país pague a tiempo sus deudas, y la mayoría opinan que Rumanía no corre ciertos riesgos, según ha mostrado un sondeo de INSCOP sobre la crisis de Grecia. Según la encuesta, un 54% de los rumanos consideran que su país tiene la ventaja de usar el leu, y de no haber adoptado el euro, un 24% opinan que Rumanía tendría una mejor situación económica en la eurozona, mientras que un 21,5% han optado por “no sé/no contestaré”. El sondeo ha mostrado también que sólo un cuarto de los encuestados opinan que los efectos de la crisis de Grecia sobre la economía y la población de Rumanía se notarán en una medida grande o muy grande, mientras que un tercio consideran que la situación de su país se verá influida sólo en pequeña medida por lo que está pasando en Grecia, un país que aspira a un nuevo préstamo de 86.000 millones de euros. La existencia de un porcentaje mayoritario que considera que Rumanía no corre ciertos riesgos por no estar en la eurozona no se debe interpretar como un voto contra la adopción del euro. El resultado representa más bien la influencia de una situación, cuyo peso en la evolución de la opinión general sobre la adopción del euro se debe evaluar, según consideran los autores del sondeo. A pesar de ello, las respuestas han indicado la gran confianza de la población en la moneda nacional, el leu. Por lo demás, la prensa internacional ha destacado que la adopción de la moneda única europea es cada vez menos atractiva para muchos de los países que están esperando esta oportunidad, citando a varios políticos de Hungría, Polonia, Croacia y Rumanía, que se han mostrado bastante prudentes ante la adhesión a la eurozona. Aunque Rumanía haya fijado 2019 como el año de la adopción de la moneda única europea, pocos creen que es un objetivo realista. Mugur Isărescu, el gobernador del Banco Nacional de Rumanía, ha declarado recientemente que este proceso incluso podría durar diez años. El mandatario ha declarado que, a pesar de los problemas causados por la crisis, la inflación en Rumanía ha bajado y se ha consolidado en bajos niveles, y el leu ha alcanzado valores normales, que se pueden comparar con las monedas de los estados europeos. Asimismo, los rumanos tienen sobre todo ahorros en lei, y los tipos de interés son mejores que en el caso de los ahorros en dólares. Además, últimamente han empezado a subir los préstamos en moneda nacional, sobre todo para las personas que tienen ingresos en lei. Mugur Isărescu ha advertido que la adopción del euro es un proceso mucho más complicado que la denominación de la moneda nacional, que, aunque fuera un proceso de simplificación, provocó ansiedad en la sociedad ante lo desconocido. Los debates sobre la adopción del euro deben ser mucho más complejos, y la gente debe estar emocionalmente preparada, ha declarado el jefe del Banco Nacional de Rumanía.