La ley del indulto, debates y sanciones
Han aumentado las voces que afirman que el proyecto de ley sobre el indulto no soluciona los problemas de las prisiones rumanas, criticadas varias veces por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
Bogdan Matei, 11.05.2017, 15:22
Desde principios de este año, el tema del indulto ha dominado los debates públicos de Bucarest más que las duraderas aficiones de los rumanos, las historias de las celebridades y el fútbol. Desde el pasado invierno, la pretensión del Gobierno formado por el PSD y la ALDE, instalado poco antes, de solucionar mediante el indulto colectivo, decidido por decreto ley, el problema de la sobrepoblación carcelaria ha irritado a la sociedad civil y ha sacado a la calle a centenares de miles de personas. Las manifestaciones, respaldadas por las críticas de la oposición de derecha, de la prensa y de los colaboradores externos de Rumanía, convencieron al Ejecutivo de renunciar al decreto ley, y a su iniciador, el impopular ministro de Justicia, Florin Iordache, de presentar su dimisión.
Pero como las prisiones continúan llenas y el Tribunal Constitucional de Derechos Humanos ha multado varias veces a Rumanía por las malas condiciones en las que viven los presos, el tema del indulto ha sido enviado al Parlamento. Acalorados, pero estériles, los debates sobre el proyecto de ley iniciado por el Gobierno no han tenido todavía otro resultado que una nueva dimisión ritual, la del presidente de la comisión jurídica del Senado, el socialdemócrata Şerban Nicolae. Costosa para la imagen ya gravemente afectada del partido, la perseverancia del mismo de incluir los hechos de corrupción entre los delitos en cuyo caso se podría aplicar el indulto ha irritado incluso al líder del PSD, Liviu Dragnea, quien ha decidido sustituir a Nicolae tanto en la dirección de la Comisión como en la dirección del grupo senatorial socialdemócrata. El recién destituido ha afirmado que el proyecto de ley, como lo han adoptado sus compañeros juristas del Senado, es totalmente ineficiente, porque no soluciona el problema de la sobrepoblación carcelaria, no responde a ninguna necesidad de la sociedad y tampoco a las obligaciones de Rumanía ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Según Nicolae, sólo unas 1.032 personas se beneficiarán de sus normas. En el espacio que ha dejado libre Nicolae ha irrumpido este miércoles el ex jefe del Estado, actualmente senador del PMP, Traian Băsescu, quien ha declarado que el PSD y Dragnea se han desdicho del problema del indulto y esto le permitirá sostenerlo desde posturas independientes. Rumanía, ha añadido Băsescu, necesita un amplio indulto, y el que promueve la izquierda tendrá como efecto liberar a tan solo 433 personas y reducir las penas para otras tan solo 589. Desatado, el expresidente ha acusado a Dragnea de que “quiere liberar a sus homólogos, y ha detallado: “quienes han robado de las casas, han violado domicilios, han robado del patio del vecino, roban de los bolsos de las mujeres en los autobuses, roban de las sociedades comerciales. Băsescu ha prometido en cambio asumir la causa de liberar a los médicos, los profesores, los funcionarios, es decir a los presos a los que llama “con preparación superior, quienes están en la cárcel por hechos de corrupción, como la toma de sobornos. Y de este modo, han afirmado los analistas, después de haber pretendido que la lucha contra la corrupción fue la dimensión fundamental de sus mandatos presidenciales, Băsescu renuncia a su testamento político, niega su posteridad e induce a sus seguidores el tardío lamento de haberle votado cada vez que presentó su candidatura.