La iniciativa ciudadana «Sin delincuentes en cargos públicos»
Los ciudadanos condenados a prisión por delitos cometidos con intención podrían perder su derecho a ser elegidos en los órganos de la administración pública local, en el Parlamento y en el cargo de presidente de Rumanía.
Eugen Coroianu, 15.07.2020, 14:49
La Cámara de los Diputados en Bucarest ha aprobado, este martes, con carácter de urgencia y con un amplio consenso político, la propuesta legislativa sobre la iniciativa ciudadana para revisar la Constitución, «Sin delincuentes en cargos públicos». Se estipula que los ciudadanos condenados a penas privativas de libertad por delitos cometidos con intención ya no podrán ser elegidos para los cargos de la administración pública local, el Parlamento y el cargo de presidente de Rumanía hasta que surja una situación que elimine las consecuencias de la condena. El líder de la USR (centro-derecha) Dan Barna ha hablado sobre un momento histórico y ha recordado que su partido había insistido en que esta iniciativa se debatiera lo antes posible. También ha hecho hincapié en que, de esta manera, se hace un poco de justicia moral a Rumanía.
«Hoy, una frase muy simple se convierte en realidad. Ya no es posible ostentar cargos en las instituciones públicas con una condena en la historia y afirmar que tiene la justificación moral para dirigir esa institución».
Barna también ha dicho que los millones de personas que han firmado esta iniciativa ahora importan y que se trata de una eliminación del desafío de la vida pública. Por su parte, el PNL (en el poder) ha declarado que apoya el proyecto de ley con la esperanza de que siga siendo una iniciativa ciudadana y no se transforme políticamente.
El líder de los diputados liberales, Florin Român:
«Como signatario de esta iniciativa, como hombre que ayudó a conseguir firmas, me hubiera gustado que esta iniciativa no estuviera contaminada políticamente, porque aquellos que firmaron tenían una lista sin logotipos de partidos, sin doctrinas. Habían dejado muy claro solo que los ciudadanos querían esto».
El líder del grupo del PSD (en la oposición, con mayoría en el Parlamento), Alfred Simonis, ha hablado sobre el consenso político y la responsabilidad en la toma de decisiones importantes. En su opinión, esta iniciativa puede recuperar la confianza de los ciudadanos en la clase política.
«En este momento tenemos esta ruptura que se refleja en el bajo capital de confianza en los políticos. El Partido Social Demócrata, como la primera fuerza política de Rumanía, tiene la obligación de ser la punta de lanza para cambiar la relación entre ciudadanos y políticos».
El PMP (centro-derecha) enfatiza, a su vez, que es un proyecto que no tiene color político, y es importante que este principio se convierta en ley lo antes posible para su aplicación. La propuesta legislativa debe ser debatida por el Senado, y de acuerdo con la Constitución, para convertirse en ley, debe ser validada por un referéndum organizado dentro de los 30 días posteriores a la adopción en la cámara alta del Parlamento. La USR considera que sería una muy buena opción que el referéndum se lleve a cabo el mismo día de las elecciones locales, programadas para el próximo 27 de septiembre, para tener en cuenta la situación de salud en el país con respecto a la propagación de la COVID-19.
(Versión española: Simona Sarbescu)