Inundaciones en Rumanía
Las lluvias abundantes registradas últimamente, acerca de las que los meteorólogos habían informado emitiendo alertas amarilla y naranja, han causado problemas en varias regiones de Rumanía. También los hidrólogos han emitido recientemente varias alertas de inundaciones para numerosos departamentos, siendo la zona más expuesta a las precipitaciones el norte del país, para el que ha sido emitido un código rojo. Se han producido riadas y crecimientos de los caudales de algunos ríos que han causado daños en decenas de localidades. En el norte extremo de Rumanía, en el distrito de Maramures, un hombre de 63 años de edad ha perdido la vida este miércoles, víctima de las riadas. Las aguas de varios ríos han inundado cientos de hectáreas de terrenos agrícolas, pastos, casas, carreteras nacionales y departamentales, mientras que algunos tramos de vía férrea se han rellenado de aluviones. Las autoridades se han movilizado para evacuar el agua de las casas inundadas. En la localidad Turbuta, del noroeste de Rumanía, el puente flotante ha sido destruido y la única vía de acceso que ha quedado es un puente peatonal inestable por lo que las ambulancias o los bomberos no disponen de posibilidad alguna para llegar a dicho pueblo. Los habitantes esperan que las aguas se retiren para volver a utilizar el puente flotante. Problemas igual de graves han sido señalados también en otras localidades en que las vías de acceso se han visto afectadas por las inundaciones donde los habitantes se han visto obligados a utilizar rutas de desvío. Los más afectados han sido los granjeros porque sus cultivos agrícolas han sido devastados por las aguas. La población de numerosas localidades del norte del país ha sido advertida a través del sistema RO–Alert con respecto al riesgo de torrentes de grandes dimensiones. Decenas de personas han sido evacuadas y en el número único para situaciones de emergencia, 112, se han registrado más de cien llamadas.
Leyla Cheamil, 23.05.2019, 15:50
Las lluvias abundantes registradas últimamente, acerca de las que los meteorólogos habían informado emitiendo alertas amarilla y naranja, han causado problemas en varias regiones de Rumanía. También los hidrólogos han emitido recientemente varias alertas de inundaciones para numerosos departamentos, siendo la zona más expuesta a las precipitaciones el norte del país, para el que ha sido emitido un código rojo. Se han producido riadas y crecimientos de los caudales de algunos ríos que han causado daños en decenas de localidades. En el norte extremo de Rumanía, en el distrito de Maramures, un hombre de 63 años de edad ha perdido la vida este miércoles, víctima de las riadas. Las aguas de varios ríos han inundado cientos de hectáreas de terrenos agrícolas, pastos, casas, carreteras nacionales y departamentales, mientras que algunos tramos de vía férrea se han rellenado de aluviones. Las autoridades se han movilizado para evacuar el agua de las casas inundadas. En la localidad Turbuta, del noroeste de Rumanía, el puente flotante ha sido destruido y la única vía de acceso que ha quedado es un puente peatonal inestable por lo que las ambulancias o los bomberos no disponen de posibilidad alguna para llegar a dicho pueblo. Los habitantes esperan que las aguas se retiren para volver a utilizar el puente flotante. Problemas igual de graves han sido señalados también en otras localidades en que las vías de acceso se han visto afectadas por las inundaciones donde los habitantes se han visto obligados a utilizar rutas de desvío. Los más afectados han sido los granjeros porque sus cultivos agrícolas han sido devastados por las aguas. La población de numerosas localidades del norte del país ha sido advertida a través del sistema RO–Alert con respecto al riesgo de torrentes de grandes dimensiones. Decenas de personas han sido evacuadas y en el número único para situaciones de emergencia, 112, se han registrado más de cien llamadas.
También en el sur de Rumanía, las lluvias abundantes han inundado las granjas para lo que ha sido necesaria la intervención de los bomberos militares que han intervenido con bombas transportables. Numerosas aldeas, se han quedado sin corriente eléctrica y han necesitado la intervención de los equipos técnicos del suministrador de electricidad.
Por otra parte, la Comisión Europea ha propuesto la concesión de una ayuda por un valor de ocho millones de euros para la región del noreste de Rumanía, fuertemente afectada por las inundaciones del verano anterior. A raíz de las lluvias abundantes registradas a mediados del mes de junio y hasta comienzos del mes de agosto del año pasado, han sido comunicadas pérdidas en el sector de la infraestructura, los terrenos agrícolas y las viviendas en seis distritos de Rumanía, pero de manera especial en los de Neamt, Bacau y Suceava. Las autoridades rumanas han estimado que los costes de las operaciones de salvación y protección civil rondan unos 295 millones de euros.