Fondos europeos para la infraestructura de Bucarest
La Comisión Europea financiará parcialmente la construcción de la línea del metro que unirá el centro de la capital con el Aeropuerto Henri Coanda de Otopeni, el principal punto aéreo de Rumanía.
Ştefan Stoica, 14.02.2019, 13:12
La comisaria europea de Política Regional, Corina Cretu, crítica tenaz de la administración de Bucarest que, en su opinión, es incapaz de utilizar fondos europeos no reembolsables para la infraestructura, anunció el pasado miércoles que el Ejecutivo comunitario había aprobado la asignación de 517 millones de euros para la construcción de una parte de la línea del metro que unirá la zona central de Bucarest con el Aeropuerto Henri Coanda de Otopeni, el mayor del país, proyecto incluido por las autoridades rumanas en el Programa Operativo de Grandes Infraestructuras. La cofinanciación europea está destinada a la construcción de un segmento de 6 kilómetros de un total de 14 kilómetros de la línea 6 del metro Gara de Nord-Aeroport Henri Coanda (Estación del Norte-Aeropuerto Henri Coanda). El proyecto también prevé construir seis nuevas estaciones subterráneas de metro entre la zona 1 Mai del centro de Bucarest y un centro comercial situado cerca de Otopeni, así como adquirir 12 trenes.
“Esta inversión del Fondo de Cohesión mejorará la vida diaria de más de 1.800 millones de ciudadanos que se beneficiarán de conexiones mejores de transporte hacia varios destinos de Bucarest”, según ha declarado Corina Cretu. La comisaria también ha añadido que espera que las autoridades rumanas encuentren soluciones para finalizar antes del 2023, plazo previsto para implementar el proyecto, la línea 6 del metro de modo que se pueda utilizar la nueva línea hasta el Aeropuerto Internacional de Otopeni.
La ministra de Fondos Europeos, Rovana Plumb, ha elogiado el anuncio precisando que espera que Metrorex, la compañía nacional que administra el metro, empiece las obras de este proyecto de gran importancia para aumentar la movilidad en Bucarest y en el distrito de Ilfov. Las obras de la línea 6 empezarán en la segunda parte de este año. Por otra parte, ¿por qué no financia la Comisión Europea todo el proyecto? Según la asociación no gubernamental Pro Infraestructura, la que critica constantemente el modo en que las autoridades rumanas gestionan el sector del transporte, la razón sería que Bucarest no ha ofrecido explicaciones pertinentes acerca de los posibles errores del proyecto. Entre otras cosas, la Comisión Europea teme que la estimación de los costos no sea realista y critica el hecho de que la línea M6 no tenga en cuenta la construcción de la nueva terminal del Aeropuerto de Otopeni. Otros aspectos que Bucarest no ha aclarado, según afirma Pro Infraestructura, tienen que ver con la perturbación del tráfico en la carretera nacional DN1 y la estimación exageradamente optimista con respecto al tiempo necesario para la implementación del proyecto, 4-5 años respectivamente.