Exclusiones en la dirección del PSD
Dos líderes del PSD, el partido más importante de la coalición del Gobierno de Rumanía, han sido excluidos del partido después de haber criticado públicamente a la dirección.
Ştefan Stoica, 06.11.2018, 12:13
La prensa y los analistas han tenido razón nuevamente: el líder del PSD, Liviu Dragnea, no es el tipo de político que pueda tolerar mucho tiempo las críticas expresadas duramente contra su manera considerada autoritaria de liderar el partido. Este lunes, la Junta Ejecutiva Nacional ha decidido por amplia mayoría excluir del PSD a dos importantes personas: el vicepresidente Adrian Ţuţuianu y el secretario general Marian Neacşu. Pero la razón no serían sus ataques contra el líder del partido, sino las presuntas acciones nocivas para la formación que está en el Gobierno, ha afirmado Liviu Dragnea:
“Espero que todos los demás compañeros entiendan que nuestros objetivos siguen siendo los mismos y ya no debemos ofrecer temas de debate que no tienen que ver con el programa de Gobierno o con lo que desean los rumanos. Cualquier ataque que se refiere a mí no implica pedir a los compañeros del Consejo Ejecutivo que excluyan a alguien, categóricamente que no. Hacemos esto sólo cuando la mayoría de nosotros constatan que se supera la línea roja. La línea roja son las acciones que afectan seriamente la estabilidad del partido y la estabilidad de la mayoría gubernamental.”
Los dos socialdemócratas han rechazado las acusaciones considerándolas sin fundamento y consideran que la decisión de la Junta Ejecutiva Nacional es una ejecución pública que tiene por objetivo sancionar el delito de expresar una opinión. Adrian Ţuţuianu:
“Nunca me he propuesto ocultar ciertas cosas que no van bien. He estado descontento con el programa de Gobierno en general. Estoy muy descontento con lo que prometimos a los ciudadanos de Dâmboviţa y no hemos conseguido hacer durante estos dos años de gobernación. Creo que el partido va en una dirección equivocada. Y también creo que un voto no significa necesariamente que aquellos que han perdido, como somos nosotros hoy, no hayan tenido razón.”
Ţuţuianu afirmó en una reunión de la filial local de Dâmboviţa (en el sur) de la que es líder, reunión grabada sin que él lo supiera, que el PSD era un partido de monos si aceptaba a un primer ministro sacado del bolsillo por Liviu Dragnea y que el actual gabinete es una tragedia desde el punto de vista de la calidad. Ţuţuianu y Neacşu no son las personas más conocidas del PSD que han criticado de manera vehemente a Liviu Dragnea. Si el ex primer ministro Mihai Tudose no ha tenido una reacción pública después de la reunión del Comité Ejecutivo, el actual viceprimer ministro, Paul Stănescu, ha acompañado a los dos políticos y ha afirmado que su exclusión es un gran error. La alcaldesa de Bucarest, Gabriela Firea, ha afirmado en un comunicado que ya no se puede continuar en el PSD bajo el terror de las exclusiones y las disoluciones. El miedo puede mantener por un tiempo el statu quo, pero en ningún caso es una solución para el progreso y la construcción, ha afirmado también Firea. Al ser preguntado qué les puede pasar a las demás personas que lo han criticado, Liviu Dragnea ha contestado secamente: “Nada malo”. De momento, han añadido maliciosamente los periodistas en sus comentarios.