Estimación sobre el descenso del número de infecciones
Las autoridades en Bucarest esperan que, dentro de unas semanas, el número de infecciones por el nuevo coronavirus empiece a bajar.
Roxana Vasile, 22.09.2020, 15:10
Hay varios elementos que hacen que este mes sea difícil respecto a los riesgos en la gestión de la epidemia de COVID-19 en Rumanía. Por ello, las autoridades han llamado nuevamente la atención de la población sobre la importancia de respetar las normas de protección sanitaria, y han afirmado que sólo en estas condiciones es posible que la situación mejore dentro de unas semanas. Nelu Tătaru, ministro de Sanidad:
“Este mes de septiembre está bastante lleno: la reapertura de los restaurantes, de los teatros, de los cines, la vuelta de las vacaciones, la congestión de los medios de transporte público, la reanudación de las clases, la campaña electoral, las elecciones del día 27… Cada una de estas actividades tiene normas de puesta en marcha y de funcionamiento para el buen desarrollo y con menores riesgos posibles. Respetar estas normas significa permanecer en una meseta de alrededor de 1.500 casos. Si respetamos las normas, entonces podemos pensar que, en la segunda mitad del mes de octubre, es posible registrar un descenso. Si no las respetamos, el número de casos incluso puede subir de un día para otro. De momento estamos en esa meseta, estamos en la segunda fase, el pico de la primera ola de la pandemia.”
De momento, Rumanía superó por primera vez los 9.000 nuevos casos la semana pasada, cuando se registró un récord de 1.713 infecciones en un solo día. Ha subido también el índice de resultados positivos del total de pruebas efectuadas, y el índice de transmisibilidad está por encima del valor 1. El número diario de muertes es relativamente constante, al igual que el número de personas ingresadas en las unidades de cuidados intensivos. Sin embargo, hay provincias como Iași (nordeste) en las que el número de plazas en los hospitales es limitado. Carmen Dorobăţ, gerente del Hospital de enfermedades infecciosas de Iași, ha dado una explicación:
“Hay pacientes que no dan negativos en la prueba específica ni siquiera después de dos o tres semanas. Algunos no quieren irse a casa, por un lado porque no se sienten seguros desde el punto de vista médico, y por otro lado porque, como han dado positivo, temen contagiar a sus familiares o no tienen las condiciones necesarias para el autoaislamiento.”
Según las cifras oficiales, el número de rumanos infectados por el nuevo coronavirus desde finales del mes de febrero hasta ahora se acerca a 115.000. Aproximadamente 91.000 de ellos se han curado, y casi 4.500 han muerto. Un cálculo elemental publicado también en la página web worldometers.info muestra que, actualmente, en todo el país, el número de personas positivas no supera los 20.000.
Versión española: Monica Tarău