El nuevo concepto estratégico de la OTAN
Para la OTAN, Rusia ya no es socio, sino que es considerada la amenaza más significativa y directa. Una nota de Bogdan Matei.
Bogdan Matei, 30.06.2022, 13:02
La cumbre de la OTAN de Madrid representa una de las más importantes reuniones de los aliados, celebradas en los últimos años, en lo que se refiere a sus resultados para Rumanía – afirmó el presidente Klaus Iohannis, al cabo de la primera jornada de la reunión aliada de la capital española. Él aseveró que el tema central de los debates celebrados y de las decisiones tomadas en la cumbre había sido la invasión militar de Ucrania, país vecino de Rumanía, por el ejército ruso, y que el nuevo concepto estratégico de la OTAN, adoptado durante la cumbre, reflejaba debidamente la situación actual, en lo relativo a la seguridad.
Así pues, Rusia ya no es considerada socio, sino que se la tacha de amenaza más significativa y directa contra la seguridad y estabilidad de los aliados. Como primicia, a la China comunista se la acusa de estar utilizando un amplio abanico de actividades políticas, económicas y militares para proyectar su potencia en el mundo. Las ambiciones manifestadas por China y sus políticas coercitivas retan nuestros intereses, seguridad y valores – constatan los estados miembros de la OTAN, que también condenan el partenariado estratégico entre Pekín y Moscú, que va en contra del orden internacional.
La OTAN también ha confirmado el refuerzo de su presencia militar en el flanco oriental, Rumanía incluida. Su capacidad de respuesta aumenta de 40.000 a más de 300.000 militares altamente cualificados. Ésta es la más importante reconfiguración de nuestra defensa conjunta, desde la Guerra Fría, ha reiterado el secretario general Jens Stoltenberg, mientras que el presidente norteamericano, Joe Biden, ha afirmado que estamos ahí y estamos demonstrando que la OTAN es más necesaria que nunca. Él ha anunciado, a su vez, una consolidación de la presencia militar estadounidense en toda Europa. La OTAN ha prometido, igualmente, apoyar a Ucrania el tiempo que resulte necesario, para que aguante ante el ejército ruso invasor. El secretario general Stoltenberg ha aseverado que el apoyo a Kiev es una obligación moral y política.
En una declaración conjunta, los países miembros de la OTAN, que ya le han suministrado a Ucrania armas valoradas en miles de millones de dólares, han anunciado haber acordado un nuevo plan de ayuda, que supone entregar equipos militares no letales y reforzar la defensa ucraniana para contrarrestar los ataques cibernéticos. La terrible crueldad de Rusia está causando un enorme sufrimiendo humano y traslados masivos de la población, manifiestan los firmantes, y Moscú lleva toda la responsabilidad de esta catástrofe humanitaria.
El ministro ucraniano de Exteriores, Dmitro Kuleba, ha saludado lo que ha llamado la posición fuerte y lúcida de los aliados respecto a Rusia. En cambio, el presidente ruso, Vladimir Putin, que se encuentra en la Asia Central exsoviética, en lo que es su primer viaje al extranjero desde que invadió Ucrania, ha denunciado las denominadas ambiciones imperiales de la OTAN, que perseguiría poner de manifiesto su hegemonía por medio del conflicto ucraniano. Putin también pretende que Rusia no tiene un problema con el inminente ingreso en la OTAN de Suecia y Finlandia, que, tras décadas de neutralidad, han decidido adherirse a la Alianza, a raíz de la invasión rusa de Ucrania.
Versión en español: Gabriela Ristea