El Centenario de la Gran Unión
El pasado 1 de diciembre, Rumanía rindió homenaje a todos aquellos que hace cien años, realizaron la unión de todos los rumanos en un Estado nacional unitario.
Roxana Vasile, 03.12.2018, 14:44
El pasado 1 de diciembre, Rumanía celebró cien años desde la creación del Estado nacional unitario. Con motivo del Día Nacional y del Centenario, se organizaron a nivel nacional alrededor de 450 manifestaciones públicas y pese a unas temperaturas muy bajas, fue el 1 de diciembre más frío de los últimos 60 años, centenares de miles de rumanos de todas las edades salieron a las calles para festejar el aniversario.
En Bucarest se organizó el mayor desfile militar de los últimos decenios, un momento único marcado por el número de militares que pasaron por debajo del Arco de Triunfo y por el nivel de la técnica militar presentada. Desfilaron 4000 militares, de los cuales 500 fueron soldados de 20 países asociados y aliados, acompañados por más de 200 equipos militares, mientras que 50 aeronaves sobrevolaron la capital. La técnica militar incluyó por primera vez el sistema de misiles aéreos Patriot y los blindados Piranha 5, transbordadores con máximo nivel de blindaje que desde 2018 se producen en Rumanía.
Por la tarde, la fiesta del Centenario se celebró también en Alba Iulia, la ciudad del centro del país donde fue proclamada, el 1 de diciembre de 1918, la unión de Transilvania con Rumanía. En Alba Iulia tuvo lugar el más amplio desfile dedicado a la Gran Unión desde que se organizan estas ceremonias.
El patriarca de la Iglesia ortodoxa rumana, mayoritaria, Daniel, y el patriarca de Jerusalén, Teofil III, oficiaron un servicio divino delante de la Catedral de la reunificación de Alba Iulia y el presidente Klaus Iohannis inauguró el Puente de la Unión y el monumento de la Gran Unión. Los rumanos que habían llegado a Alba Iulia de todos los rincones del país así como del extranjero, celebraron el Centenario a través de la música, ya que intérpretes llegados de todas las regiones históricas llevaron con ellos las tradiciones, las costumbres y los trajes populares de sus lugares natales.
Tampoco faltó la “gran unión de los cocineros” que prepararon decenas de porciones de comida y las ofrecieron gratis a los participantes llegados a Alba Iulia, ciudad que se transformó durante todo el día en una inmensa arteria peatonal. La noche del 1 de diciembre concluyó con unos espectaculares fuegos artificiales.
También en Alba Iulia se celebró la vigésimo primera edición del Congreso de la Espiritualidad Rumana destinado a consolidar la unidad de los rumanos del país con los rumanos que viven en las comunidades históricas, y con los que viven en el extranjero por varias razones económicas.
El 1 de diciembre en la diáspora también ha estado presente el alma rumana, algo que se ha reflejado en los numerosos actos culturales que se organizaron en las sedes del Instituto Cultura Rumano y en las misiones diplomáticas de Rumanía en el extranjero.
El presidente Klaus Iohannis exhortó a todos los rumanos del país y del extranjero a permanecer unidos en torno a los valores de la democracia, la libertad y la igualdad ante la ley, y a construir juntos la Rumanía del próximo siglo.
A su vez, la primera ministra, Viorica Dancila, ha manifestado el deseo de que los rumanos empiecen el segundo siglo de existencia de la Rumanía Grande continuando el ejemplo de los antepasados para llevar a efecto los proyectos estratégicos de la nación.