Efectos de la ola de calor en Rumanía
El tiempo sigue siendo abrasador en Rumanía. Se han introducido restricciones en las carreteras y el tráfico ferroviario también se ha visto afectado
Mihai Pelin, 15.07.2024, 11:15
Rumanía sigue bajo la influencia de una masa de aire tropical. Para el miércoles se esperan máximas de hasta 42 grados a la sombra. Además, las mínimas también serán muy altas y no bajarán de los 20 grados.
A partir del jueves, las temperaturas bajarán, pero entonces el tiempo cambiará, indican los responsables de la Administración Meteorológica Nacional. Habrá chubascos torrenciales, tormentas eléctricas, granizo aislado y lluvias intensas en todas las regiones. El malestar provocado por las altas temperaturas seguirá siendo muy acentuado, esta vez debido a la presencia de una mayor humedad.
Debido a las altísimas temperaturas, se han introducido restricciones en las carreteras nacionales y rápidas y en las autopistas. Hasta el miércoles, los vehículos con una masa autorizada superior a 12 toneladas no podrán circular por las carreteras. En algunos tramos de carretera, ni siquiera se permitía circular a los vehículos de más de 7 toneladas y media, y los conductores estaban descontentos.
El tráfico ferroviario también se vio afectado. Los trenes circulan entre 20 y 30 kilómetros por hora más despacio debido a las altas temperaturas de las vías, y muchos trenes llegan con retraso.
Los efectos de la ola de calor están afectando a la salud de la población, especialmente de los niños, los ancianos y las personas con discapacidades o enfermedades crónicas. En las calurosas calles asfaltadas y entre bloques que irradian calor, hasta el cuerpo más sano puede descomponerse. Sin una hidratación adecuada para mantener la temperatura corporal en torno a los 37 grados centígrados pueden producirse calambres por calor, insolación, agotamiento por calor o shock hipertérmico, según los médicos. En muchas ciudades, las autoridades han habilitado centros de primeros auxilios para quienes tengan que abandonar sus hogares.
En todo el país ha aumentado en los últimos días el número de llamadas al servicio de ambulancias. La ola de calor y la sequía han dejado a miles de hogares sin agua potable. En algunas localidades, el agua se distribuye según un programa establecido, y los alcaldes piden a la gente que haga un uso responsable del agua y evite regar las verduras o llenar las piscinas.
Para hacer frente a las sofocantes temperaturas de las últimas semanas, cada vez más gente utiliza aparatos de aire acondicionado. Para enfriar la temperatura de una habitación y mantenerla fresca, los aparatos de aire acondicionado necesitan funcionar entre 4 y 7 horas al día. Por eso las facturas de electricidad son considerablemente más altas durante este periodo. Con el consumo disparado, las autoridades advierten del riesgo de cortes de electricidad.
Además, se han registrado varias fluctuaciones en distintas partes del país al recalentarse la red eléctrica. Según los expertos, estos fenómenos serán más frecuentes en los próximos años a medida que se caliente el clima. Además de Rumanía, varios países del sureste de Europa se están viendo afectados por la ola de calor. Se registraron altas temperaturas en Atenas, Skopje, Belgrado, Sofía, Zagreb, Budapest y Estambul.
Versión en español: Antonio Madrid