Disputas entre el poder y la oposición
Dos semanas después de las protestas antigubernamentales de Bucarest, la jefa del Ejecutivo acusa a la oposición de haber intentado asumir el poder a través de medios no democráticos. Más detalles al respecto en un material firmado por Daniela Budu.
Daniela Budu, 24.08.2018, 12:37
La primera ministra Viorica Dancila ha tenido este jueves la primera reacción en referencia a las protestas antigubernamentales de la diáspora celebradas hace dos semanas en Bucarest acusando a la oposición de haber intentado asumir el poder a través de otros medios ya que no lo logró en las elecciones. La dignataria ha precisado que ha notado un asalto dirigido contra algunas instituciones estatales como la Gendarmería y ha pedido a los ministros y jefes de las instituciones subordinadas que eviten los conflictos.
Viorica Dancila:
“Ruego a todos los ministros y jefes de las instituciones subordinadas que eviten esta espiral del conflicto en el que tratan de atraernos los que no han sido capaces de ganar el poder en las elecciones y que ahora tratan de adquirirlo a través de medios no democráticos. Nuestra respuesta a todos estos retos deben ser los hechos y proyectos concretos para los rumanos.”
La jefa del Ejecutivo opina que la oposición trata por razones estrictamente políticas fomentar la espiral del conflicto que divide la sociedad. Como respuesta, el líder del PNL, Ludovic Orban, afirma que no hay ninguna espiral del conflicto fomentada por la oposición o el presidente Klaus Iohannis sino una espiral de las mentiras y los abusos cometidos por el líder del PSD, Liviu Dragnea, la primera ministra Viorica Dancila, la ministra del Interior Carmen Dan y todos los que han ordenado reprimir las protestas y herir a la gente que participó en la protesta antigubernamental del pasado 10 de agosto. En un comunicado, el líder liberal reprocha a la primera ministra que no asumió la responsabilidad por las acciones de los gendarmes y sus efectos en los protestatarios. Ludovic Orban afirma que los liberales volverán a solicitar que la ministra Carmen Dan, la prefecta de la capital y los jefes de las fuerzas del orden que intervinieron en Bucarest sean nuevamente oídos en el Parlamento. A la vez, los liberales exigen al presidente del PSD, Liviu Dragnea, que convoque la sesión extraordinaria solicitada por la oposición para averiguar la verdad sobre las protestas del pasado 10 de agosto ya que, según ellos, hasta ahora nadie ha respondido por los abusos de los gendarmes o las acciones violentas. Centenares de quejas han sido presentadas en la Fiscalía en referencia al modo excesivo en que intervinieron los gendarmes en la protesta de Bucarest.
Por otra parte, la Cámara de Comercio Estadounidense de Rumanía, AMCham, ha alentado a responsabilidad en declaraciones y acciones por parte de los dirigentes y de los que ocupan cargos públicos en Rumanía así como al cese de la discriminación de los rumanos en función de su empleador. Conviene precisar que Liviu Dragnea ha declarado en una cadena de televisión que una parte de las compañías multinacionales financia las protestas de Rumanía y que algunas empresas tienen intereses económicos que afectan al Estado rumano.