Detalles del caso Bodnariu
Las autoridades rumanas tratan de ayudar en el caso de la familia Bodnariu.
Roxana Vasile, 14.01.2016, 15:07
El caso la familia rumano-noruega Bodnariu, a quien las autoridades locales noruegas le han quitado sus cinco hijos por supuestas correcciones físicas aplicadas por parte de sus padres, sigue causando reacciones emocionales. Paralelamente a las protestas desarrolladas en Rumanía y en la diáspora rumana de numerosos Estados de todos los continentes, así como a los amplios debates en los medios de comunicación, las autoridades rumanas continúan haciendo gestiones para ayudar a la familia. Así, las autoridades han recomendado al matrimonio Bodnariu dos abogados noruegos que se han dedicado a casos similares.
El embajador rumano en Oslo, Adrian Davidoiu, ha debatido este asunto en el Ministerio noruego de Exteriores y ha subrayado que se trata de un caso social con un impacto muy grande, por eso ha propuesto también una cooperación política. Además, el embajador Davidoiu ha pedido la integración de los niños con edades comprendidas entre 3 meses y 10 años en la familia paterna que vive en Rumanía y también ha solicitado que los padres puedan visitar a los niños institucionalizados y que los menores de edad no estén separados. Otras solicitudes han sido detalladas por la portavoz de la diplomacia de Bucarest, Raluca Lunculescu:
“El embajador rumano ha solicitado acceso para el cónsul rumano como observador en las etapas corrientes de los procedimientos. La parte noruega ha subrayado que también la familia debe formular una solicitud para que el cónsul pueda visitar a los niños. La parte noruega ha indicado que esto será posible si el interés superior del menor no se ve afectado.”
Aunque los niños también tienen ciudadanía rumana, los diplomáticos de Bucarest tienen límites legales referentes a la implicación en la investigación que se desarrolla en Noruega. Sin embargo, una delegación del Parlamento de Rumanía se va a despalzar a Oslo.
Por otra parte, en Bucarest, la Embajada de Noruega en Rumanía ha anunciado que, por iniciativa propia, se ha comunicado con el Ministerio rumano de Exteriores, con el Parlamento y con la Oficina del primer ministro para ofrecer información sobre el Servicio noruego de Protección Infantil (Barnevernet). Sus acciones, según han precisado los representantes de la diplomacia, redundan en beneficio de todos los niños de Noruega, indistintamente de su nacionalidad o residencia, siendo su principal preocupación el interés superior de los niños.
Según datos del Ministerio rumano de Exteriores, hasta hoy 16 niños de siete familias rumanas han sido quitados por las autoridades noruegas. De estos casos, cinco se han solucionado .