Del déficit presupuestario a las medidas sociales
En Rumanía, las cifras del déficit presupuestario arrojan un saldo negativo de casi 58 000 millones de leus (unos 11 600 millones de euros) tras los cuatro primeros meses de este año
Corina Cristea, 28.05.2024, 12:04
En Rumanía, los gobiernos tienen una difícil tarea: en un año de maratón electoral deben encontrar soluciones financieras en un país que arrastra un déficit excesivo desde hace varios años. Hay que respetar ciertos rigores para no sobrepasar los límites en los que se centran los ojos de Bruselas, y el intento de encontrar un denominador común entre estos y el mejor funcionamiento posible del país ha llevado a un presupuesto estatal con un déficit del 5 % del PIB este año, por debajo del 5,68 % del año pasado.
Los datos publicados ahora por el Ministerio de Hacienda muestran que el déficit presupuestario ya ha aumentado en los cuatro primeros meses hasta el 3,24 % del PIB, un 2 % más que en el mismo periodo del año pasado. El Estado tuvo unos ingresos de casi 183 000 millones de leus (unos 37 000 millones de euros), un 15 % más que el año anterior, incluidos el IVA y los impuestos de sociedades y nóminas. Pero el gasto también aumentó un 29 % (principalmente en salarios, asistencia social y bienes y servicios), hasta unos 240 000 millones de leus (unos 48 000 millones de euros). En el déficit de abril influyó en gran medida, según el Ministerio, el pago anticipado de 9000 millones de leus (unos 1800 millones de euros), que representan el valor total de las pensiones distribuidas antes del Primero de Mayo y las vacaciones de Semana Santa.
La atención del Gobierno debe seguir aumentando, tanto más cuanto que Rumanía debe alinearse, a partir del 1 de julio, con la directiva europea sobre la fijación del salario mínimo bruto en el país, lo que significa que los asalariados con bajos ingresos cobrarán al menos la mitad del salario medio de la economía. Elevar el salario mínimo a 3700 leus (unos 740 euros) desde los actuales 3300 leus (unos 660 euros) estará en la agenda del Gobierno esta semana. Y la cantidad que no estará sujeta a ningún tipo de impuesto pasará de 200 leus a 300 leus.
Las decisiones fueron tomadas por la coalición gobernante PSD-PNL, que también fijó un tope del 20 % para los recargos comerciales de los productos fabricados en Rumanía. Se espera que el ejecutivo tome una decisión en un futuro inmediato. El primer ministro Marcel Ciolacu:
«Ese concepto se aplicó en Francia, con la misma lógica, para proteger a los productores nacionales. En Rumanía no tenemos ningún sistema minorista mayoritario con capital rumano. Esto ha ocurrido, por ejemplo, en Polonia. Y entonces hay que buscar soluciones para proteger a los productores locales. Porque el minorista puede imponer ciertos recargos».
El PSD y la PNL también debatieron reducir el gasto presupuestario limitándolo a lo estrictamente necesario hasta la primera rectificación presupuestaria de este año.
Versión en español: Antonio Madrid