Conclusiones de las misiones del FMI y el BM
Representantes del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial estuvieron en Bucarest para actualizar las perspectivas macroeconómicas de Rumanía

Leyla Cheamil, 10.02.2025, 10:30
Las delegaciones del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial han finalizado sus conversaciones en Bucarest con representantes de las principales instituciones encargadas de las políticas monetaria y fiscal de Rumanía.
El equipo del FMI se reunió con representantes del nuevo Gobierno y del Banco Nacional para analizar la reciente evolución financiera y económica y actualizar las perspectivas macroeconómicas. El país no tiene actualmente un acuerdo de financiación en vigor con el Fondo Monetario Internacional, pero la institución financiera evalúa anualmente la evolución de la economía rumana sobre la base de las consultas del Artículo IV.
El primer ministro Marcel Ciolacu transmitió a los expertos del FMI el compromiso del Ejecutivo de mantenerse dentro del déficit presupuestario del 7% del PIB y de aplicar las reformas emprendidas en el Programa Nacional de Reformas. Asimismo, señaló que las medidas de reducción de los gastos de personal, de reestructuración del aparato presupuestario y de reorganización administrativo-territorial son prioritarias para el próximo período.
El ministro de Finanzas, Tánczos Barna, reafirmó el compromiso del Gobierno de reducir el déficit presupuestario y crear un Estado más esbelto en los próximos siete años, aumentando las asignaciones para inversiones que apoyen la economía, durante una reunión con la misión del FMI. También señaló que deben aplicarse una serie de medidas para restablecer gradualmente el equilibrio presupuestario y evitar una crisis económica similar a la de 2009.
El FMI publicó sus últimas previsiones sobre la evolución de la economía rumana el pasado otoño, cuando estimó un déficit para finales de 2025 al mismo nivel que el objetivo de déficit del 7% fijado por el Gobierno. Las estimaciones del Fondo son, sin embargo, más optimistas, tanto en términos de crecimiento económico – un 3,3%, frente a solo un 2,5% calculado por las autoridades de Bucarest – como de inflación, calculada en un 3,6%, por debajo del objetivo del 4,4% fijado por el gobierno.
Por su parte, los representantes del Banco Mundial se felicitaron del plan de reformas del gobierno y de la atención prestada a las inversiones, señalando que Rumanía es un socio fuerte y resistente. Para gestionar mejor los proyectos conjuntos, ambas partes acordaron un mecanismo de trabajo con reuniones más frecuentes en el próximo periodo.
El director ejecutivo del grupo, Eugene Rhuggenaath, declaró que el Banco Mundial ampliará las inversiones en Rumanía en energía, transición ecológica, infraestructuras y otras áreas con potencial de crecimiento. Los representantes de la institución también elogiaron el apoyo de Rumanía a Moldavia (ex soviética, de mayoría rumanohablante) y Ucrania, así como la contribución de Bucarest a garantizar la estabilidad en la región.
El primer ministro, Marcel Ciolacu, declaró que las autoridades siguen apoyando el desarrollo de las infraestructuras y los sectores agrícola, industrial y de la construcción. También proseguirán los proyectos de mejora de los servicios sanitarios y energéticos.
Versión en español: Antonio Madrid