¿Cómo será el presupuesto para el año 2025?
Se espera que a finales de esta semana, el presupuesto de Rumanía para 2025 sea aprobado por el Gobierno y enviado al Parlamento.
Corina Cristea, 30.01.2025, 12:20
En un contexto económico complicado, en el que el nivel de deuda pública ha superado el 54% del Producto Interior Bruto y el déficit presupuestario se acerca al 9% del PIB, elaborar el presupuesto estatal de Rumanía para 2025 es una tarea nada fácil. Sobre todo porque dos de las principales agencias financieras internacionales han reducido la calificación del país de estable a negativa. El proyecto de presupuesto, basado en un déficit de no más del 7% del PIB, será aprobado por el Gobierno a finales de esta semana y luego enviado a las mesas del Parlamento para su debate y adopción.
Según el proyecto, el Estado deberá primero reducir sus propios gastos. De esta forma, el presupuesto de la Administración Presidencial se reduciría en un 10 por ciento, el del Senado en un cinco y el de la Cámara de Diputados en un nueve. La indexación de pensiones continúa en análisis, pues desde Finanzas afirman que no será posible lograrla este año.
El ministro competente, Tánczos Barna, afirma que el proyecto de presupuesto para 2025, que calificó de suficiente, prevé el dinero necesario para el pago de salarios y pensiones y para el desarrollo de las localidades. «En el presupuesto tenemos carreteras para 20 millones de rumanos. Tenemos dinero en el presupuesto para que todos los rumanos desarrollen infraestructura rural. Tenemos dinero para que todos los rumanos paguen los salarios en Educación, en el Ministerio del Interior, en todos los ministerios que necesitan pagar salarios, a nivel de 2024. Hemos asegurado la financiación de todas las pensiones (…) tal como fueron calculadas¨ y «Se pagaron el año pasado, en noviembre-diciembre, a ese nivel se van a pagar en el 2025, mes a mes», puntualizó el ministro de Finanzas.
Mencionó también que el presupuesto del Ministerio de Defensa será mayor que en 2024 y que también aumentarán los presupuestos de otros ministerios, como Medio Ambiente, Sanidad, Educación y Transportes. Se necesita un Estado más flexible para que los gastos de personal en cada institución se reduzcan, siendo la mayoría con una reducción del 5%, sin tomar en cuenta, sin embargo, educación, hospitales o medicina interna.
Respecto a los préstamos, el ministro precisó que todos los tomados en cuenta son necesarios para garantizar la financiación del déficit. «Rumanía se endeudó mucho el año pasado, se endeudará menos este año y aún menos el año que viene». «Tenemos un calendario de reducción de préstamos año tras año, a lo largo de siete años», afirma Tánczos Barna. Afortunadamente, el empeoramiento de la calificación del país no vino acompañado de un cambio en la calificación desde la categoría recomendada para los inversores, lo que habría aumentado los costos de endeudamiento de Rumanía. Según los analistas, persiste el escepticismo entre los inversores y las agencias de calificación, dada la inestabilidad política y el retraso de las reformas estructurales.
(version española: Simona Sarbescu)