¿Cómo será el nuevo Parlamento?
Después de las elecciones del pasado domingo, dos cosas son seguras: el Partido Social Demócrata ha obtenido casi la mitad de los escaños parlamentarios y formará una coalición con la Alianza de los Liberales y Demócratas (ALDE).
Ştefan Stoica, 16.12.2016, 13:18
Los datos finales de las elecciones del pasado 11 de diciembre publicados por la Oficina Electoral Central confirman que el Parlamento de Bucarest estará integrado por 6 formaciones. Con 221 senadores y diputados, el PSD dominará el futuro legislativo. Sólo le han faltado 12 escaños para ser mayoría, pero según han anunciado ya, formarán una coalición con la Alianza de los Liberales y Demócratas (ALDE). La formación del antiguo primer ministro liberal Calin Popescu Tariceanu ha obtenido 29 escaños, uno menos que la Unión Demócrata de los Húngaros de Rumanía y tres más que el Partido Movimiento Popular del expresidente Traian Basescu. Después de este escrutinio adjudicado al PSD, el podio será completado por el Partido Nacional Liberal con 99 escaños y la sorpresa de esta segunda mitad del año, la recién llegada al escenario político y parlamentario de la Unión Salvad Rumanía (USR) que ocupará 43 escaños en el legislativo. Las minorías, aparte de la húngara, cuentan con 17 escaños. El futuro Parlamento tendrá 465 miembros, 120 menos que el legislativo anterior.
El mandato del actual Ejecutivo finaliza el próximo lunes, 19 de diciembre, y el martes será convocado el nuevo Parlamento. La próxima semana traerá, después de las consultas entre el presidente y los partidos, las aclaraciones que todo el mundo está esperando. Si no se produce ninguna sorpresa política mayor, el PSD y la ALDE formarán el futuro equipo ejecutivo. El jueves pasado, el líder socialdemócrata, Liviu Dragnea, el responsable de esta victoria electoral, ha afirmado que el programa gubernamental tendrá en cuenta todas las promesas de la campaña electoral entre las cuales figuran el aumento de los sueldos de los empleados públicos y del salario mínimo, facilidades fiscales para los jubilados así como más dinero para los estudiantes. Sin embargo, Liviu Dragnea no ha respondido a la principal pregunta de los periodistas, es decir quién va a dirigir el Gobierno. En cambio ha asegurado que no desea crear una crisis. Liviu Dragnea:
“Soy una persona responsable y no pienso promover un conflicto inútil. Actuaremos de manera honesta con una propuesta que pueda ser aceptada y que desde el punto de vista matemático y político no pueda ser rechazada. Espero que el presidente de Rumanía respete las reglas sagradas de la democracia y del voto popular.”
La propuesta cumplirá “todas las condiciones legales y constitucionales”, ha afirmado Dragnea. Condenado en régimen abierto por su implicación en el referéndum de destitución del antiguo presidente Traian Basescu, Dragnea se enfrenta a dos obstáculos en su camino hacia el cargo de primer ministro. El primero es una ley que prohíbe a un condenado penal ser ministro y el segundo es el criterio de integridad impuesto por el presidente Iohannis antes de las elecciones según el cual no designará primer ministro a una persona con problemas legales.