Afganistán, final de misión
En el Arco del Triunfo en Bucarest ha tenido lugar la ceremonia militar que marca el final de la misión del Ejército rumano en Afganistán.
Roxana Vasile, 22.07.2021, 13:22
Después de casi 20 años de presencia ininterrumpida en Afganistán, los militares rumanos han vuelto a casa, junto con la retirada de las tropas de los países participantes en las operaciones desarrolladas en este teatro de combate. 27 de ellos perdieron la vida en las misiones o en los ataques de los terroristas talibanes. Más de 200 resultaron heridos. Como muestra de aprecio y de agradecimiento, el final de la misión del Ejército de Rumanía en Afganistán ha sido marcado este 21 de julio por una ceremonia militar en Bucarest. Varios destacamentos que representan las estructuras militares que han cumplido misiones en uno de los teatros de operaciones más difíciles desde 2002 hasta junio de este año han marchado por debajo del Arco del Triunfo. La zona ha sido sobrevolada por un avión C-130 Hercules y por un grupo de tres aviones C-27J Spartan de la Base 90 Transporte Aéreo Otopeni. Han sido condecoradas las banderas de combate de las unidades que han liderado o han ejecutado misiones. Han sido pronunciados de forma solemne los nombres de los militares rumanos que murieron cumpliendo su deber, y los participantes en la ceremonia han guardado un minuto de silencio en su memoria. El presidente Klaus Iohannis ha depositado una corona de flores. En su discurso, ha destacado su sacrificio y el de sus familias, al recordar también que la misión del Ejército rumano en Afganistán quedará en la historia como la operación militar más larga, más compleja y más importante fuera del territorio nacional después de la Segunda Guerra Mundial. Klaus Iohannis:
“Queridos militares, habéis escrito historia, sois los héroes de nuestras generaciones y estamos orgullosos de vosotros. Habéis mostrado que el amor al país, el espíritu de sacrificio, el valor, la abnegación y el patriotismo siguen siendo puntos de referencia fundamentales de nuestra nación. Nunca olvidaremos a nuestros héroes.”
Más de 32.000 militares de todas las categorías de fuerzas participaron en misiones en Afganistán: mujeres y hombres que, por un tiempo, dejaron en casa a sus padres, a sus hijos o a sus seres queridos para participar en una misión que puso sus vidas en peligro. El primero en ser enviado a este país, en junio de 2002, fue el Batallón 26 de Infantería de Craiova (sur), conocido como “Escorpiones Rojos”, dirigido entonces por el teniente coronel Nicolae Ciucă, actualmente general retirado y ministro de Defensa. Dicho de otro modo, éste lideró la primera misión militar en Afganistán y coordinó, después de casi 20 años, la retirada de las tropas de allí. En esta doble calidad, el ministro Ciucă ha declarado que, a través de su misión en Afganistán, Rumanía ha conseguido ganar el respeto de sus colaboradores en la OTAN, en la guerra mundial contra el terrorismo. El costo total de la participación rumana en Afganistán ha alcanzado más de 3.000 millones de lei (el equivalente a aproximadamente 600 millones de euros).
Versión española: Monica Tarău