¿En efectivo o con tarjeta?
En Rumanía, la limitación de los pagos efectuados por particulares a empresas a solo 5000 leus diarios ha suscitado la preocupación de muchas personas e incluso de expertos
Mihai Pelin, 07.11.2023, 10:05
Después de que el Gobierno limitara los pagos en efectivo en un intento de controlar la evasión fiscal, varios bancos rumanos han anunciado en los últimos días aumentos de las comisiones por transacciones en efectivo. El primer ministro, Marcel Ciolacu, mantuvo recientemente una reunión con miembros de la Asociación Rumana de Bancos, tras la cual se acordó que estas comisiones bancarias no aumentaran ni para las personas físicas ni para las jurídicas. Además, los representantes del Ejecutivo y los banqueros establecieron un mecanismo de consulta permanente en el que también participará el Banco Nacional.
Rumanía no tiene problemas económicos y cuenta con recursos naturales y una mano de obra bien cualificada, una creciente inversión extranjera y un alto nivel de inversión pública. Sin embargo, para garantizar la sostenibilidad económica es necesario luchar contra la evasión fiscal, reducir el gasto presupuestario y aumentar el rendimiento de la administración pública, declaró el primer ministro en la reunión. Pero la cuestión importante sigue siendo la medida de los pagos en efectivo.
Marcel Ciolacu dijo que hay preocupaciones legítimas que han surgido en el espacio público y que deben ser analizadas.
Marcel Ciolacu:
«Es un problema para los pequeños empresarios y allí con pagos en efectivo no tener largas colas en el banco. Creo que nadie quiere eso. Por eso también quiero hablar con las PYMEs y creo que por grupos de productos».
Por su parte, el ex primer ministro Nicolae Ciucă, líder del PNL, afirmó que la cuestión de los pagos en efectivo debería revisarse tras un análisis.
Nicolae Ciucă:
«O regresa a los 10 000 leus y eso significa utilizar la norma de antes, o vuelve después de esta consulta con los especialistas».
Paralelamente, los grupos parlamentarios del PNL han iniciado una proposición de ley que vuelve a los anteriores umbrales para el límite de efectivo que pueden utilizar en sus transacciones las personas físicas y jurídicas.
Adrian Cozma, diputado del PNL:
«Volvemos a la forma original de la Ley 70 de 2015, por la que los topes siguen siendo de 50 000 leus para particulares, transacciones entre particulares, y 10 000 leus entre empresas, como es normal».
La medida de limitar los pagos en efectivo a 5000 leus, ordenada por el Gobierno, también es criticada por los representantes de la Asociación de Empresarios de Pequeñas y Medianas Empresas, que la consideran ineficaz. En su opinión, aunque pretende reducir la evasión fiscal, podría tener el efecto contrario al esperado. Por su parte, los expertos afirman que la medida enmascara la incapacidad del Estado para recaudar impuestos, y que los bancos recaudarán más dinero de los pagos con tarjeta. Los analistas también señalan la situación de Chipre en 2013, cuando se reestructuraron los dos primeros grandes bancos y los ciudadanos solo podían retirar un máximo de 50 euros al día de sus tarjetas bancarias. Algunos ven en la limitación de los pagos en efectivo de los particulares un control de su riqueza por parte del Estado y del sistema bancario.
Versión en español: Antonio Madrid
