Rumanía y el cambio climático
El Banco Mundial ha elaborado un Informe sobre Clima y Desarrollo para Rumanía
Sorin Iordan, 25.10.2023, 12:50
Rumanía es muy vulnerable a las inundaciones y las sequías, y el impacto de estas catástrofes se deja sentir en varios sectores, según el Informe del Banco Mundial sobre el Clima y el Desarrollo de Rumanía. El documento, hecho público el martes, muestra que entre 1970 y 2021, las inundaciones fueron la catástrofe meteorológica más grave en Rumanía en términos de número de sucesos, número de personas afectadas y daños totales. Las pérdidas medias anuales debidas a las inundaciones podrían alcanzar los 1 700 millones de euros, y en las zonas donde el riesgo de inundación es significativo más de 150 000 personas podrían verse afectadas. Los autores del informe señalan que, por otra parte, la disponibilidad de recursos hídricos en Rumanía es aproximadamente la mitad de la media de la UE.
En 2022, Rumanía se enfrentó a una de las sequías más graves registradas, que interrumpió el suministro de agua en 220 ciudades, redujo la producción hidroeléctrica en un tercio y puso en peligro otras fuentes de energía, como la nuclear. También ha reducido la producción agrícola al menos un 25 %, ha multiplicado por siete los incendios forestales y ha provocado restricciones a la navegación por el Danubio.
En este contexto, el Banco Mundial considera necesarias grandes inversiones en seguridad de las presas, rehabilitación de las dañadas, adaptación a nuevos usos y ajuste a los nuevos regímenes hidrológicos. En el debate sobre la presentación del informe del Banco Mundial, el presidente rumano, Klaus Iohannis, declaró que los efectos del cambio climático son cada vez más graves para los rumanos y afectan negativamente a la economía nacional. Cree que hay potencial para mejorar significativamente la calidad de vida de los ciudadanos y, al mismo tiempo, llevar a cabo el proceso de descarbonización necesario para alcanzar la neutralidad climática. Klaus Iohannis:
«Estamos respondiendo a los retos climáticos con medidas de adaptación a las nuevas realidades, pero también con medidas de mitigación, es decir, reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero. Rumanía forma parte de los procesos internacionales de transición climática que inevitablemente traerán consigo cambios importantes en muchos sectores de nuestra vida y actividad. Es esencial garantizar que la transición climática sea equitativa, integradora y compatible con el crecimiento económico».
El Informe sobre Clima y Desarrollo del Banco Mundial muestra que, si Rumanía toma medidas para mejorar su resistencia al cambio climático y reducir las emisiones de carbono, puede multiplicar casi por tres su renta nacional en los próximos 30 años. Los expertos del Banco calculan que la inversión necesaria para descarbonizar el sistema energético superará los 344 000 millones de euros de aquí a 2050, lo que equivale aproximadamente al 3 % del PIB de Rumanía.
Versión en español: Antonio Madrid