Delta del Danubio y drones
En el sudeste de Rumanía siguen cayendo fragmentos de dron, probablemente rusos
Bogdan Matei, 14.09.2023, 12:16
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rumanía ha informado y está consultando a los aliados de la OTAN acerca de la evolución de la situación en la frontera rumano-ucraniana, tras encontrarse nuevos fragmentos de dron, muy probablemente rusos, en territorio rumano. Se trata del tercer incidente de este tipo en los últimos días, y el encargado de negocios de la Embajada de la Federación Rusa ha sido convocado al Ministerio de Asuntos Exteriores rumano. La diplomacia rumana ha vuelto a exigir enérgicamente «el cese de los repetidos ataques contra la población y la infraestructura civil ucranianas, y el cese de la irresponsable escalada de la situación de seguridad por parte de la Federación Rusa, incluso en la frontera rumano-ucraniana». Bucarest también insiste en que «se acaten las normas del derecho internacional, incluida la inviolabilidad del espacio aéreo de Rumanía».
Mientras tanto, el Ministerio de Defensa afirma que «no hay indicios de que haya sido un ataque intencionado contra Rumanía», y en el espacio aéreo rumano no ha habido vuelos no autorizados, ni violaciones del espacio aéreo. Sin embargo, los comunicados oficiales no disminuyen la angustia de la población que vive cerca de la frontera. Los residentes del Delta del Danubio (distrito de Tulcea, sudeste) ya han recibido mensajes RO-ALERT, por medio de los cuales se les advierte de la posibilidad de que caigan objetos del espacio aéreo, en el contexto de los ataques del ejército invasor ruso contra Ucrania. El mensaje se ha enviado conforme a una decisión del Comité Nacional de Situaciones de Emergencia. Se aconseja a la población que mantenga la calma y se proteja bajando a sótanos o yendo a refugios de protección civil. Paralelamente, un destacamento de zapadores ha construido en un pueblo dos refugios de elementos prefabricados de hormigón y los ha entregado a las autoridades locales.
Todo el mundo parece esperar que este tipo de incidentes se repitan. Los rusos atacan frecuentemente los puertos fluviales de Ismail y Reni, al sur de Besarabia, territorio rumano del este, anexionado por la Unión Soviética estalinista en 1940, tras un ultimátum, y asumido por Ucrania en 1991, como Estado sucesor. Estos puertos son una importante salida para las exportaciones ucranianas, después de que Rusia se retirara en julio del acuerdo relativo al tránsito de cereales por el mar Negro. Esenciales para el transporte de mercancías por el Danubio, Reni se encuentra a unos 13 kilómetros en línea recta de la ciudad rumana de Galaţi, e Ismail está en el brazo Chilia del Delta del Danubio, convertido en frontera entre Rumanía y Ucrania.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, también afirmó desde la semana pasada que no había ninguna información que indicara un ataque ruso intencionado. El alto cargo recordó que incidentes similares se habían producido, igualmente, en Polonia. No obstante, los acontecimientos de Rumanía, advierte Stoltenberg, «demuestran el riesgo de un accidente» provocado por el conflicto de Ucrania. Su opinión también la comparten los analistas militares rumanos, que subrayan que el ejército ruso no es famoso ni por su rigor, ni por sus escrúpulos, y menos aún en tiempos de guerra.
Traducción al español: Gabriela Ristea